Foto: Reuters, Javier Duarte es detenido en Guatemala |
México vive un momento en el cual es
importante realizar análisis político
para la planeación estratégica y observar
la coyuntura local, nacional e
internacional en que se enmarca la captura de Javier Duarte o lo que en redes sociales se llamó #JavierDuarteDetenido realizada el
Sábado 15 de Abril.
Esto ocurre en un ambiente político complejo, de cara a las Elecciones 2017 en dónde se compiten 3 gubernaturas y 1 estado con
elecciones municipales.
Una de las entidades federativas con elección a gobernador, el Estado de México, tierra natal del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, y bastión político
del Partido Revolucionario Institucional
(PRI) se encuentra por primera vez con posibilidad de cambio en el gobierno.
El Estado de México nunca ha sido
gobernado por otro partido político
distinto al PRI desde su fundación
el 4 de marzo de 1929. De ahí han salido importantes actores políticos priistas que han ocupado secretarías de estado, coordinaciones
parlamentarias en el congreso, y posiciones partidistas nacionales como: Isidro
Fabela, Alfredo del Mazo (dinastía), Gustavo Baz, Carlos Hank, Ignacio
Pichardo, Emilio Chuayfett, César Camacho, Arturo Montiel y el actual Presidente de México. Es además una reserva electoral de votos para el
partido; en los últimos 20 años los resultados electorales para el PRI en la entidad
han superado 1.3 millones de votos (1999) y llegado hasta los 3 millones de sufragios (2011). Por lo anterior expuesto el Estado de México tiene una relevancia
simbólica, histórica, electoral y
estructural para el sistema político
mexicano.
En los últimos meses, las encuestas rumbo a la gubernatura de la
entidad muestran un escenario de alta competencia
electoral en el cual tres fuerzas políticas PRI, Morena y el PAN se
disputan la gubernatura.
Las encuestas que presentaron preferencia bruta se convirtieron a preferencia efectiva. |
En el escenario nacional existen temas
estructurales como: menores flujos de
inversión ante la incertidumbre comercial con los Estados Unidos, los gobiernos (nacional y subnacionales)
tienen una menor capacidad de gasto, y existen regiones donde la pobreza, la impunidad y la corrupción
alimenta altos niveles de violencia
(el Banco Mundial estima que la corrupción le cuesta a México 9% de la Economía
del país). Lo anterior ha provocado desencanto y enojo ciudadano hacia un
gobierno federal con legitimidad mediática cuestionada, débil credibilidad y
falta de eficacia en la implementación
de las reformas estructurales.
Las encuestas
presidenciales marcan una tendencia donde la contienda se polariza entre izquierda y derecha, dejando al partido en el gobierno en tercer lugar de las
preferencias.
Encuesta Buendia y Laredo. Preferencia electoral para Presidente de la República. Pregunta: Si hoy fueran los comicios para elegir al titular del Ejecutivo, ¿Por cual partido votaría usted? |
En el escenario internacional de la región
de América del Norte, agencias privadas como Stratfor, Eurasia Group,
AT Kerney, así como la Oficina del Director de Inteligencia
Nacional de los Estados Unidos apuntan a una desilusión generalizada entre la población, el crecimiento de presiones políticas y sociales principalmente
producto de la desigualdad; así como
el crecimiento de lo “anti-stablishment”
con lo que la disyuntiva “sensibilidad/insensibilidad
política” continuará generando agenda pública.
En esta coyuntura se da la detención de Javier Duarte, exgobernador de Veracruz, quien fue señalado desde 2008 cuando ocupó el cargo de Secretario de Finanzas de su estado por adquirir un endeudamiento con condiciones opacas y desventajosas para las finanzas estatales, asimismo desde el inicio de su mandato (2010) tuvo denuncias de hechos y fincamiento de responsabilidades por parte de la Auditoría Superior de la Federación, enfrentó además 2 solicitudes de juicio político por parte de la oposición a nivel federal, la primera en 2015 promovida por el PRD y la segunda en 2016 promovida por el PAN.
La captura de Duarte es la de un político que durante 10 años fue señalado por actos de corrupción y malos manejos desde puestos de gobierno, a esta la trasciende la coyuntura que es resultado de un proceso de descomposición en el tiempo. A pesar de la detención, en México sigue sin implementarse un sistema que procure evitar que un político incurra en actos de corrupción.
En esta coyuntura se da la detención de Javier Duarte, exgobernador de Veracruz, quien fue señalado desde 2008 cuando ocupó el cargo de Secretario de Finanzas de su estado por adquirir un endeudamiento con condiciones opacas y desventajosas para las finanzas estatales, asimismo desde el inicio de su mandato (2010) tuvo denuncias de hechos y fincamiento de responsabilidades por parte de la Auditoría Superior de la Federación, enfrentó además 2 solicitudes de juicio político por parte de la oposición a nivel federal, la primera en 2015 promovida por el PRD y la segunda en 2016 promovida por el PAN.
La captura de Duarte es la de un político que durante 10 años fue señalado por actos de corrupción y malos manejos desde puestos de gobierno, a esta la trasciende la coyuntura que es resultado de un proceso de descomposición en el tiempo. A pesar de la detención, en México sigue sin implementarse un sistema que procure evitar que un político incurra en actos de corrupción.
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